miércoles, 13 de julio de 2016

Viajar en tren...

... es un placer.
Más si lo hacemos camino de La Vecilla para pasar el día a la orilla del Curueño.
Día pleno. Día lleno de convivencia.
Disfrutamos de lo lindo.
Cigüeñas. Visita a la Casa Consistorial de La Vecilla. Subida al mirador.
Entre los baños de sol y los baños en agua tan fría como la de hoy nuestra piel ha quedado suficientemente curtida; si además le damos una capina de grasa -la que llevábamos en los dedos tras las alitas de pollo- no solo coge color sino también brillo.
Tocó helado y descubrimos una nueva forma de llevar la visera -creará tendencia-.
A la vuelta montamos las tiendas de campaña donde duermen ahora los chicos de 6º.
Nos duchamos y cenamos... ¡¡pizza!! y copa de nata y chocolate.
Noche de cluedo: Amores revueltos y complicadas investigaciones.
Y buenas noches.
Buenas noches (antes de la una de la madrugada)








3 comentarios:

  1. No puedo decir nada más q mil graciaa y eso es poco sois maravillosos

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  2. Ese helado supo a poco! Un beso grande y un abrazo muy fuerte a todos los que hacéis posible que esos peques tengan esas caras de felicidad!

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  3. Ese helado supo a poco! Un beso grande y un abrazo muy fuerte a todos los que hacéis posible que esos peques tengan esas caras de felicidad!

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